Descripción
La maceta de fresón produce frutos que contienen hasta un 90% de agua. Son muy ricas en vitamina C, hierro o ácido ascórbico. El trasplante debe realizarse entre los meses de marzo a junio y su temporada de recolección y mejor época de consumo es entre los meses de abril y julio. La floración de la planta es muy larga y se solapa con la producción. La maceta de fresón es un cultivo que se adapta muy bien a muchos tipos de climas. Una fructificación adecuada se desarrolla en torno a los 15-20ºC. Se puede cultivar en otras fechas siempre que el cultivo esté protegido por plástico para alcanzar dichas temperaturas.
También se puede cultivar con un plástico negro en la base que impida la aparición de malas hierbas y al mismo tiempo, reduce la necesidad de riego. Recoger todas las fresas dañadas o pasadas para evitar la aparición de enfermedades, sobre todo con la humedad del verano.
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